Las ofertas condicionarán que el Ayuntamiento tenga que devolver casi dos millones de euros a la Unión Europea.
Cuando hace dos meses el concejal de Economía y Empleo, Rubén Rosón, afirmó que el mercado de La Corredoria abriría aunque fuera con un solo puesto, parece que adivinó el futuro. Solo dos de las cuatro ofertas presentadas (tres fruterías y una carnicería) han cumplido los requisitos exigidos en los pliegos de contratación, sin embargo una de ellas está en el limbo, ya que los técnicos le han otorgado un cero y la licitadora no incluye el compromiso de inversión, según informaron ayer fuentes municipales.
Por esta razón, todo parece indicar que la apertura de esta plaza de abastos está en manos de, al menos, una de esas fruterías, que salvarían al Ayuntamiento de un nuevo problema porque si dentro de nueve días, las puertas de este mercado siguen cerradas, el Ayuntamiento tendrá que devolver a la Unión Europea cerca de dos millones de euros por, justamente, no haber logrado ponerla en marcha, ya que fue el plan Urban el que financió el 80 por ciento de su construcción.
En teoría, todas las actuaciones enmarcadas en este escenario debían estar terminadas en cuatro años, pero la construcción del mercado arrancó con retraso y la UE dio un margen adicional de dos años más tras el fin del programa. No han sido suficientes.
Ambas fruterías pujan por un mismo puesto: el número tres. Una de ellas ha presentado un canon de 65,50 euros por metro cuadrado y la otra de 65 euros. Serán cincuenta céntimos los que decidan el futuro de este puesto, la perdedora tendrá que conformarse con otro espacio. Si las puertas del mercado abren antes del día 31 se haría con estos dos puestos, o con uno solo. Después, el Ayuntamiento convocaría otro concurso en el que participarían los licitadores que han presentado mal la documentación y aquellos que estén interesadas en montar su negocio, una vez que vean cómo funciona la plaza de abastos. En total, el espacio está dividido en catorce puestos.
FUENTE: El Comercio.