Los socialistas retan a Foro a definir antes de marzo el nuevo sistema para el reparto de las ayudas y las primeras dotaciones
La suspensión a uno de enero de la tramitación de peticiones de comunidades de vecinos para ayudas a la rehabilitación de fachadas hasta que se defina el nuevo sistema de reparto y la situación de prórroga presupuestaria que ha dejado en cero euros el marcador de los recursos económicos disponibles ahora mismo lleva al PSOE a pensar que «2018 será un año en blanco» en la concesión de estas populares subvenciones.
Por ello, el Grupo Socialista ha decidido mover ficha y registraba ayer una iniciativa a debatir en el Pleno de febrero en favor de la tramitación antes de marzo de las bases del nuevo sistema de concesión de las ayudas y de las primeras modificaciones presupuestarias para dotarlas de recursos. La edil socialista Marina Pineda defendía la urgencia de poner en marcha unas ayudas muy demandadas por los vecinos y que favorecen la actividad, y por tanto el empleo, en el sector de la construcción local. «Es de las ayudas más demandadas. Hay una media de 300 peticiones al año. A una media de 20 pisos por comunidad estamos hablando de 6.000 familias», explicó. Desde 2011 a finales de 2017 se habían concedido 1.175 subvenciones por una cuantía de 58 millones. Y quedaban pendientes de resolución unas 500 peticiones.
