Las transacciones suben un 9,5%, con Llanes a la cabeza y los mayores incrementos porcentuales en Cangas de Onís y Parres.
El volumen de transacciones de vivienda aumenta de forma contenida en el oriente, con una tendencia al alza que se asienta año a año y supera por segundo ejercicio consecutivo la barrera de las mil operaciones de compraventa. A lo largo de 2022 fueron 1.193 las viviendas que cambiaron de manos, lo que supone un incremento del 9,5% respecto a 2021 según los datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Antes de la pandemia, un revulsivo para el sector inmobiliario, la cifra se limitaba por ejemplo a las 741 de 2019.
Sin embargo, en una radiografía más amplia temporalmente los datos relevan que la comarca sigue lejos de aquellos volúmenes previos a la crisis inmobiliaria. En 2008, año de inflexión, se llegaron a registrar 1.510 operaciones. En 2007 fueron 1.791. Como nota curiosa, algunos concejos sí presentan mejores cifras que antes de aquella crisis. Son Parres, Peñamellera Baja y Onís. about:blank
El detalle de 2022 depara por su parte patrones que se asientan, pero también novedades. Entre las cuestiones que se repiten está el predominio de la vivienda de segunda mano frente a la nueva.
Las transacciones de ese tipo supusieron de hecho el 95,4% de las registradas. En toda la comarca, las casas de nueva construcción vendidas bajaron en un 12%. Fueron apenas 54 y en cinco concejos la cifra quedó a cero. Fueron Amieva, Caravia, Onís, Peñamellera Alta y Ponga, los menos poblados del oriente. No obstante, los números tampoco son más halagüeños en concejos con más población y tirón turístico. En Llanes, por ejemplo, fueron 16 las transacciones de vivienda nueva. Siguió en el ranking Cangas de Onís (14) y Parres (7).
Una novedad que despuntó el pasado año es el mayor volumen de operaciones en concejos del interior, frente a la pujante costa.
En cifras globales -vivienda de segunda mano y nueva- Llanes lideró como de costumbre el mercado con 416 operaciones que supusieron un incremento del 11,5%. Sin embargo, porcentualmente, el gran incremento lo vivió Cangas de Onís, que creció un 86% y alcanzó las 110 operaciones. Siguieron Parres, con un incremento del 51% y 82 viviendas, y Ribadedeva, con un 32% más y 66 casas.
Piloña creció por su parte un 10% y alcanzó las 135 operaciones, desbancando a Ribadesella (121), tradicionalmente segundo concejo con mayor actividad. En 2022, sin embargo, las operaciones bajaron un 24%. Los expertos coinciden sobre el caso riosellano en que la explicación reside en la escasez de vivienda. «Falta producto, no es que no haya demanda», explica Borja Cue, CEO de Veri Corral Inmobiliaria, con oficinas en Llanes, Ribadesella, Oviedo y Gijón. En el mismo aspecto coincide Ramón Sobrino, de Inmobiliaria Sobrino: «No hay mucha oferta en Ribadesella».
Pese al mayor incremento porcentual del interior, en las inmobiliarias coinciden en que «la costa sigue siendo la primera opción de los compradores». Sobrino recuerda que en los municipios interiores, como Cangas de Onís, «el precio es menor». Borja Cue suma al precio otra clave que también explica el tirón, las «distancias cortas» al litoral. Por todo ello los clientes «abren el abanico», precisa.
Compradores de Madrid
Al igual que en el conjunto de España, la subida de los tipos de interés -y el consiguiente encarecimiento de las hipotecas- se dejó notar en la recta final del año. Si en el primer y el segundo cuatrimestre de 2022 las transacciones fueron 299 y 322 respectivamente, en los dos últimos se estancaron en 286.
El balance general es que «hay demanda y se vende bien, pero no para tirar cohetes», indica Borja Cue. A los compradores tampoco «les vale cualquier cosa a cualquier precio». «Fue un año bueno y el incremento razonable», señala Ramón Sobrino.
En cuanto a perfiles, continúa predominando el clásico de segunda residencia. Sigue también presente el de personas que se mudan a la zona rural para teletrabajar, si bien no es el mayoritario. «Hay quien busca como inversión, para usar y alquilar o pensando en la jubilación», añade el CEO de Veri Corral.
La clientela procede principalmente de Madrid y una apreciación común de los expertos es que está bajando el mercado del País Vasco, tradicionalmente pujante. «Hubo años que era el primer cliente, pero ahora mismo no es destacable», explica Ramón Sobrino.
FUENTE: El Comercio.
