Cuando nos planteamos cambiar a la empresa de limpieza de nuestra comunidad, aparece un concepto que muchas veces nos resulta desconocido pero que puede influir considerablemente en el coste final: lo que generalmente denominamos subrogación de los trabajadores.
Aunque la subrogación existe en varios sectores nos centraremos en Asturias y en el de la limpieza, ya que sin duda es con el que nos encontramos más frecuentemente en las comunidades.
¿Qué es la subrogación? Muy a grandes rasgos es la obligación que tiene la empresa entrante (a la que queremos contratar) de asumir los contratos del personal de la empresa saliente (a la que queremos cesar) adscrito a la comunidad. Simplificando: la nueva empresa de limpieza debe incorporar a su plantilla a los trabajadores que limpiaban en nuestra comunidad manteniendo sus contratos y respetando su antigüedad.
Lógicamente este proceso está regulado y deben cumplirse una serie de requisitos que se pueden consultar en el Convenio Colectivo del sector de Limpieza de Edificios y Locales del Principado de Asturias https://sede.asturias.es/bopa/2019/01/03/2018-12672.pdf
¿Por qué afecta esto a la comunidad? Por dos razones principalmente.
Primero porque si el motivo del cambio de empresa de limpieza es la labor desempeñada por el trabajador, debemos saber que, en caso de que se produzca la subrogación, éste tendría derecho a continuar en la comunidad, con lo que no solucionaríamos el problema.
Y segundo porque, cuando solicitamos presupuestos, las empresas suelen repercutir en ellos parte o la totalidad del coste que les supone contratar nuevo personal, por tanto lo normal es que sean más caros que lo que estamos pagando.